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7 motivos para poner césped artificial en espacios públicos

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Con la llegada del verano, las piscinas y las zonas públicas se ponen a punto para recibir visitantes. Por esa razón, la decoración es muy importante y uno de los elementos que visten de manera óptima nuestras ciudades es el césped artificial. Una de las diferencias clave entre césped artificial y natural es que el natural, finalmente, se estropea debido a la gran afluencia de personas que caminan sobre él. Por ello, si un municipio quiere reducir considerablemente sus gastos, deberá colocar césped artificial.

Cabe decir que el césped artificial tiene diferentes tipos, de fibras más altas o más cortas, entre otras características. Por lo tanto, no será el mismo césped el utilizado en una terraza de un bar que el de una piscina municipal, según el espacio en el que sea colocado necesitará unas cualidades u otras. Así pues, si quieres usar césped en una piscina, deberás emplear uno con alta capacidad drenante que absorba la máxima cantidad de agua. Además, ese tipo de céspedes, también evitan la formación de hielo.

Otra de las ventajas es que es ignífugo: si se desencadena un incendio y la llama roza el césped, inmediatamente se extingue. Por último, es relevante decir que el césped artificial es antideslizante, así que no tendrás ningún tipo de problema al pasear por la piscina municipal de tu ciudad. Los elementos que lo componen no se ven afectados por el cloro, así que supone un gran ahorro.

¿Por qué debemos poner césped artificial en espacios públicos?

Este tipo de césped tiene un aspecto muy parecido al natural, lo que le da una presencia muy agradable a los espacios públicos por donde paseamos.

Además, es apto para cualquier clima, con unos cuidados mínimos su color verde aguantará durante todo el año, incluido el periodo estival. Esta razón es una de las más importantes de la colocación de césped artificial, además del ahorro que supone.

Por lo que concierne al medio ambiente, cabe decir que el césped artificial es reciclable y re-utilizable. No contamina. También, al requerir poca agua, nuestros bolsillos lo notan y, por supuesto, hacemos un favor al planeta.

Otra de las ventajas es que se puede colocar en todo tipo de superficies, tanto duras como blandas. Por ejemplo, en tierra, hormigón o terrazo, entre otras. Podemos ver césped artificial en parques infantiles, piscinas o rotondas.

Así mismo, es fácil de limpiar y de mantener; gracias a eso, conseguimos ahorrar tiempo y, una vez más, dinero. Con un simple cepillado, podemos eliminar todas las bacterias que se forman en el césped. El regado con agua no es indispensable, pero sí aconsejable. Además, en las épocas del año más calurosas, con el regado podremos disfrutar de una sensación de frescor al entrar en contacto con el césped.

Un elemento muy importante es que es anti alérgico. Así que la gente que quiera dar un paseo por los jardines de su ciudad y decida tumbarse, no tendrá ningún tipo de problema si el césped es artificial. Si tienes hijos o mascotas, tampoco tienes que preocuparte por ellos.

Por último, al tratarse de un componente artificial, no necesita la luz solar para crecer, por tanto, es una buena opción utilizar césped artificial en zonas con sombra.

¿Dónde podemos utilizar césped artificial?

Campos de fútbol

Pistas de pádel

Campos de golf

Parques

Centros comerciales

Azoteas

Medianas, carreteras, rotondas

Aparcamientos

Piscinas

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